Un
mal día… te hace pensar y descubres que…
Se
te ha olvidado la forma de reír, el mal humor te persigue,
No
te acuerdas del significado de ilusión, se te ha quedado por el camino,
Todo
lo que haces se transforma en decepción, se ha escondido en tu bolsillo,
Ahora
es tu compañero de viaje,
Ya
no sabes sentir, o tal vez no has sabido nunca.
Te
observas por dentro y no encuentras el sentido, has perdido el rumbo,
Ahora
solo huyes, pero… ¿de qué? ¿de nada?…
Estás
en el ojo del huracán, estás ahí en medio, no ves la forma de salir,
Simplemente
estás inmóvil, quieta…,
Pero
debes hacerlo porque nada se para, nada te espera,
El
tiempo fluye, de hecho corre.
Gritas
en silencio, estás desesperada pero tú… tú sigues sin hacer nada…
Si,
un mal día, sin duda, te hace pensar.